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Riads, el alojamiento en Marruecos

Marruecos es uno de los países del norte de África más soleados y luminosos. Uno de los últimos países árabes en despedir el sol. Por ésta razón es uno de los preferidos para los turistas. Los visitantes de Marruecos son de todo tipo: aventureros excursionistas que prefieren el senderismo por el Atlas (una cordillera de montañas que recorre 2.400 quilómetros en el norte del continente africano) o persones que buscan relajarse en un país lleno de misticismo. De todas maneras, una de las mejores formas de alojarse en Marruecos, tan si se prefiere la aventura como la relajación, son los Riads, palacetes marroquís embaldosados con un jardín en el centro que, a su turno, muchas veces acogen una fuente y frutales cítricos como limoneros o naranjos.

Para los que buscan un alojamiento diferente, es posible acceder a lujosos Riads a muy buen precio. En el corazón de la antigua Medina de Marrakech, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1985, hay encantadores Riads. El visitante que se aloje en los riads de esta ciudad podrá disfrutar de una forma muy próxima de los encantos que ofrece este destino, cada vez más popular. Cerca de la Medina o ciudad vieja, se encuentra la mítica plaza Jamaa el Fna. En esta plaza, siempre llena de gente, el visitante podrá escuchar los contadores de cuentos, una figura ya desaparecida en España, o gozar de las acrobacias de los acróbatas y los encantadores de serpientes. Una plaza que encierra todo lo imaginable.

En la segunda ciudad más poblada de Marruecos, Rabat, también encontrará fantásticos Riads. El turista que se aloje en sus alojamientos podrá visitar monumentos como el Mausoleo de Mohamed V o el palacio real y la sede del gobierno actual, donde trabajan y residen más de 2.000 persones.

En los hoteles que ofrecen sus servicios en Tánger, muchos de ellos situados en lo más alto de la Medina, el turista podrá disfrutar de las vistas en el Estrecho de Gibraltar. Los Riads son una forma típica de alojamiento que se encuentra también en otras ciudades de Marruecos como Essaouira, Ouarzazate o Chefchaouen.